sábado, 2 de noviembre de 2013

Los Zartos (P4)

Capítulo VI: Lengüitas de Coco.
                                    (más o menos así se ven las Lengüitas)


Viernes 9
Septiembre 2010
10:00 p.m.

Es toda una locura ¿por qué los Zartos secuestran solo chicas? ¡Esto parece un Hentai barato! He estado escondida en algo parecido a un armario, en realidad es como una habitación con todo y su baño. Dispone de una ventana y una puerta al exterior, pero ambas están cerradas por dentro y fuera. Estaba ahí encerrada y solo disponía de una cama, una bombilla y la televisión.

Otra cosa interesante: Solo secuestran chicas, pero asesinan a todo chico que se les atreviese, ¡a cualquiera!
Debido a esto mi tía me envía a mí a hacer los mandados, claro no importa que me secuestren, ¡pero que maten a su hijito consentido de 40 años es algo horrible! Bah, gracias a esto de estar acá he desarrollado una pequeña adicción a las Lengüitas de Coco. Son como un tipo de galleta con regusto a coco, lo cual la hace irresistible y provoca "seguidilla", algo así como ganas de comerla a todo rato.

Recientemente la invasión se distribuyó a otras partes de Latino América, luego de tomar nuestra isla pasaron a invadir lugares como Cuba, Puerto Rico, México, Uruguay y, como si fuera poco, también han conquistado Canadá y Estados Unidos. Fue un ataque bien organizado por lo cual no dio tiempo a investigar nada sobre el enemigo, supongo que yo fui la persona con mayor contacto alien.

Los pocos canales que aún dan noticias solo dicen lo jodidos que esta el mundo, es bastante preocupante. Lo peor es que hoy se acabaron las Lengüitas de Coco y debo salir a comprar. Quien este leyendo esto se preguntará ¿qué clase de loco tendría su tienda abierta en una invasión como esta? Pues quien se pregunte esto es porque realmente no conoce a los dominicanos.

Espere a que empezara a oscurecer, no recordaba muy bien las habilidades de un híbrido, pero me dio por suponer que tenían mala vista durante la noche. Además podría ocultarme en las sombras ocasionadas por el mal funcionamiento de las luces de la calle. Era sorprendente que hayan logrado dominarnos haciendo poco daño a la tierra y la ciudad.

Salí caminando en silencio con una lista de cosas que necesitaba, primero pasé por la panadería de Libertad y Arturo, los únicos que hacen las galletas. Quería llevarme a casa dos paquetes, sin embargo solo había uno ya que los demás estaban en preparación. Me lo llevé, dispuesta a venir más tarde por el segundo. Fui con mucha precaución al supermercado, compré leche, pan, mantequilla, queso y otras cosas necesarias para la vida femenina (¬¬ ).

Fui a pagar, en la registradora había un hombre bastante mayor, muy contrario a lo que se acostumbra. Allí me encontré a un chico muy parecido a Sebastian, pero con el pelo castaño y los ojos negros. Me sonrió, le sonreí. Salí pero el imbécil  salió tras de mi gritandome -¡Oye! ¡Espera!- Acaso ese chico de aproximadamente 19 años NO valoraba su vida lo suficiente? Me giré y dije -¿Me hablas a mi?- Me preguntó sobre las lengüitas y dónde conseguirlas. Le explique como llegar, pero puso cara de retrasado y me dijo -¿Podrías llevarme?- Lo pensé un poco ¿valía la pena arriesgarme? Los híbridos no me asustaban, a menos que hubiera un puro cerca de ellos. Debía pensar que podría secuestrarme, y pensar en este chico, podrían matarlo o herirlo. ¿Y si me encontraba con Diego? Era mucho riesgo.

Al salir de mis pensamientos me encontré con una dulce cara de cachorrito rogandome -Anda ¿sí?- me dio un poco de fastidio pero accedí aclarando -No soy responsable si te pasa algo malo- sonrió -Yo sé cuidarme solo- dijo él -Mi nombre es Lucas- -Yo soy Emely-. Luego de las presentaciones nos pusimos en camino por los lengüitas...

Continuará...

2 comentarios:

  1. muy buena narración, espero que la continúes con ansias... kisu

    ResponderEliminar
  2. Muchas gracias a todos los que dejaron +1, en total se hicieron 12. :)

    ResponderEliminar