miércoles, 25 de junio de 2014

Yo y mi "Zona de Confort"

"En el ámbito de la psicología, la zona de confort es un estado de comportamiento en el cual la persona opera en una condición de "ansiedad neutral", utilizando una serie de comportamientos para conseguir un nivel constante de rendimiento sin sentido del riesgo (White 2009).1
 En el ámbito del coaching, se conoce como zona de confort al conjunto de límites que, sutilmente, la persona acaba por confundir con el marco de su íntima existencia.
Sin duda, es una de las expresiones más significativas porque define muy gráficamente el acomodo de aquellas personas que han renunciado a tomar iniciativas que les permitan gobernar sus vidas.
El coaching a través de un proceso -por lo general- sencillo y breve, resulta muy eficaz para alcanzar nuevos horizontes. Indiscutiblemente, cuando se abandona el camino más trillado aparecen alternativas que merecen ser tenidas en consideración." - Zona de Confort. Wikipedia.org

En este caso, al término "zona de confort" vamos a aplicarle otro significado, uno más físico. A partir de ahora, lo reconoceremos con este concepto: "Zona de Confort: Es todo aquel espacio físico, por pequeño que sea, donde una persona se siente en libertad de ser quien es, sin límite. También aquel que le proporciona seguridad y calma sus miedos, pues tiene en su mente la idea de que es el lugar en el cual no le pasará nada y estará a salvo. Generalmente, en este espacio también se localizan representaciones físicas del "Yo interno" de la persona en cuestión".

 A veces, esto se asocia más a las personas tímidas o con algún trastorno, pero la verdad es que todos poseemos un lugar que, por grande o pequeño que sea, representa aquella zona en la que dices "Ok, estoy aquí y estoy bien, nada malo puede pasarme", sin embargo ¿qué pasa cuando ese lugar es perturbado o, para usar el término que más me parece, "violado"? Pues simple: Todo se desmorona.

En lo personal , esa zona es mi habitación. A  lo largo del tiempo que llevo usándola (que no es mucho) me he encargado de llenarla de cosas, pensamientos y demás que la han hecho como mi guarida. El lugar en el que me siento tan yo, tan segura, tan cómoda que incluso me permite expresarme abiertamente en este blog.

Hace un tiempo, una de mis tías estuvo en mi habitación conmigo, estábamos hablando y ella estaba en mi cama, entonces me dijo "Me siento tan rara de estar aquí, es como si estuviera violando algo" y en ese momento me reí, pero comprendí que se refería a que el lugar era tan mio que era extraño estar allí.

Así pues, con el tiempo, este se ha vuelto el lugar donde lloro si lo necesito, donde río si lo necesito, donde grito si lo necesito.

Debo confesar que nunca he sido una persona muy fuerte sentimentalmente, pero he aprendido a hacer cara a muchas cosas por una razón: Poseo mi propio tiempo y espacio, que vivo más allá de nadie y que nadie puede afectar y eso lo vivo aquí, en mi Zona de Confort.

He de confesar que últimamente he pasado muchas cosas. Estoy estudiando medicina, lo cual es estresante; además estoy un poco mal de salud y demás complicaciones de la vida de una adolescente de 17 años. También he de confesar que cada vez que sentía que no podía más prefería, en gran medida, venir a esta zona porque no quería fastidiar a nadie con mis problemas (Cada quien con lo suyo ¿no?).Pero, en estos últimos días, me he sentido muy decaída. No quería hacer otra cosa que estar en esta zona y no separarme. 

Como tengo esa percepción trato, tanto como puedo, no meterme con lo que considero es parte de la Zona de Confort de otras personas, siguiendo el famoso "No le hagas a otros lo que no quieres que te hagan". Sin embargo, hoy he sentido una seria violación a mi espacio y debo decirlo:

"¡NO AGUANTO MÁS, COÑO!"

Es muy frustrante haber tenido un mal día, mejor dicho una mala semana, un mal mes y cuando vas al único lugar que consideras seguro te das cuenta Ese lugar NO es seguro.

¿Entonces qué haces? TE TENGO NOTICIAS: EL LUGAR QUE CREÍAS SEGURO, NO LO ES.

Ahí es cuando te derrumbas, no sabes que hacer, imagina: El lugar que creías era el más seguro del mundo, es realmente vulnerable.

Lo primero es tratar de tener calma, CLARO QUE SERÁ DIFÍCIL, pero no hay de otra.

Lamentablemente, vivimos en un mundo donde no hay respeto por nada ni nadie, donde lo más preciado para ti no le vale nada a los demás y, lamentablemente, cuando el lugar más seguro del mundo es destrozado, solo queda tomar los pedazos y tratar de construir otro más fuerte pero dentro de nosotros.

¿Cómo superar una crisis cuando se siente tal amenaza?
No lo sé, no sé realmente si hay un método. Mi consejo:
  1. Ve a tu zona.
  2. Estáte allí, reconocela, cálmate y verifica que tanto de ella reconoces como "tuyo" aún.
  3. Desahógate. ¿Necesitas llorar? Hazlo. ¿Necesitas gritar? Hazlo. Al fin y al cabo, para eso es ese lugar.
  4. Una vez halla salido todo, relájate. Concéntrate en algo que te guste hacer allí y verás que, poco a poco, podrás estar en paz.
  5. Cuida mejor la entrada a esa zona, si es que quieres seguir teniéndola como tuya o, simplemente, reemplazala por otra zona, física o no, donde realmente puedas sentirte seguro.
Quizá a muchos les parezca una tontería, pero no lo es.




Todos necesitamos un lugar en el que podamos sentirnos seguros, un lugar que podamos llamar "mío", un lugar para el egocentrismo puro y duro. Un lugar donde podamos ser ese "Yo". 


domingo, 22 de junio de 2014

Palomas Mensajeras (P4)

Levantarse cuando se está enamorado es una tortura. Despiertas y tu primer pensamiento suele ser esa persona. Eso es gracioso, en especial contando que, seguramente, tu último pensamiento la noche anterior fue esa persona también.

Lo primero que esa criatura hizo fue leer el papel que Marc le había dejado, se sonrojó, suspiró. Gritó de emoción haciendo que su dama de compañía entrase. Emocionada, le contó a ella todo, absolutamente todo sobre Marc, incluyendo la visita de anoche y le hizo prometer que no contaría nada a nadie. De inmediato, le pidió que fuese al mercado y comprase una paloma con una cinta, y le pusiera las iniciales D.D. 

La señorita obedeció en el acto y Diana esperó escribiendo una carta, sincerando sus sentimientos:

"¿Sabes?
Me agradas.

Me gusta hablar contigo
de hecho, no me canso.

A veces me desesperas,
Pero eso no quita que te quiera...

Me gustas.
Tu boca, tu lunar
Tus gestos, Tu manera de hablar.

Esa risa "delicada"
Que se escucha a cuatro cuadras.

En fin...
¡Tengo ganas de verte!"

La dama llegó con la paloma y, ni corta ni perezosa, la carta fue enviada.

Esta carta no tuvo respuesta. Tras varios días esperando, sin recibir ni una carta ni una visita, Diana optó por enviar un mensajero, un caballero montado en su poderoso corcel le acercaría la carta, esta vez perfumada, a su amado.

Diana le dio instrucciones precisas de regresar en la noche con la posible respuesta, y el caballero partió de inmediato.

Las horas parecían moverse sin ganas, como si no quisieran partir jamás, como si quisieran quedarse ahí para siempre.

Finalmente, el sol se metió tras el psiquiátrico y Diana vio al caballero acercarse, con su caballo presionado y relinchando, yendo a todo galope.

Diana bajó las escaleras para ir al encuentro del joven caballero, quien se bajó de su caballo.

Arrodillándose ante Diana, le entregó la carta que ella misma había enviado, aún sellada.
-¿Qué ha pasado? ¿No estaba? O... ¿Es que no ha querido recibirla?- el caballero no la miraba a los ojos, mantenía la vista fija en el suelo tratando de rehuir su mirada lo más posible -¡Contéstame!- La voz entrecortada del joven trataba de salir de su boca (sin mucho éxito he de decir). -Mi Lady... El destinatario ha...- -¡¿"Ha" qué?!-

-Ha muerto- logró decir el joven de una vez, como si estuviera escupiendo algo que le tapase la garganta.

El Shock de la chica fue tal que se desmayó.

La verdad es que no es una historia con un final feliz, pues Diana enloqueció y fue encerrada en el psiquiátrico, lugar que no hacía más que recordarle su terrible pérdida.


Fin

Mi opinión sobre el Matrimonio Homosexual

Como algunos sabrán, yo soy de República Dominicana. Un "pequeño" país en el caribe que ocupa algo más de la mitad de una isla entre Cuba y Puerto Rico. Mi país tiene fuertes creencias religiosas basadas en el Catolicismo (y creo que eso está bien). Sin embargo, enfrenta grandes problemáticas, como muchos países, sobre El Aborto y El Matrimonio Homosexual. El día de hoy, quiero dar una pequeña opinión sobre el segundo tema, además tratar de explicar un poquito lo que pienso de ambos grupos.


Advertencia: Es probable que tu opinión no sea igual a la mía, no estoy aquí para ofender a nadie ni mucho menos, solo quiero expresar mi punto de vista. No es mi intención hacer sentir mal a nadie. Sí crees que eres demasiado sensible, abstente de leer esto.



Es cierto, hay que tolerar a aquellos que dicen "Sí" con respecto al matrimonio homosexual y respetar su decisión, pero también hay que respetar y tolerar a aquellos que dicen "No".



Entiendo que los que dicen "No" por motivos religiosos dirán "Dios hizo a Adán y Eva, no a Adán y Esteban (aunque nadie menciona a Hada y Eva )" pero deben tener en cuenta Uds. que mucha gente no comparte sus creencias (son de otra religión o simplemente no creen en un ser superior) y aún así respetan su derecho a decir "Sí creo", aunque no estén de acuerdo.

Pienso yo que hay que tolerar y respetar a ambos grupos, #ViveYDejaVivir. El respeto al derecho ajeno es la paz.

Personalmente, me da igual que seas homo o hetero siempre y cuando np trates de violarme 



En resumen, creo que el matrimonio Homosexual está bien. Son solo dos personas queriendo pasar su vida juntos y expresar su amor, nada más y nada menos. Además, a ti no te afecta (a menos que te guste algún integrante de la pareja).