lunes, 14 de octubre de 2013

Triángulo Traumático (P9)

Kimberly corrió al baño sin dar ninguna explicación. Alice la observaba con ternura mientras se alejaba. Damian no entendía pero el lazo que unía a Kim y Alice era tan fuerte que una podía, casi, leer los pensamientos de la otra.

Al llegar al baño Kim se encerró. Revisó cuidadosamente a que no hubiera nadie más e, inmediatamente, empezó a vomitar. No podía contener el asco que sentía, tanto hacía su tío como hacía su propio cuerpo, que fue maltratado y ultrajado. Vomitó todo lo que había comido, incluido algunas cosas de la cena del día anterior. No podía contenerse, todo era echado afuera. -Maldito bastardo- decía, cada vez que el vomito la dejaba respirar, recuperaba el aliento y regresaba a los vómitos, para luego decir -espero que te pudras en la cárcel-.

Gracias al Código Penal de Sandy, el sujeto en cuestión estaría encerrado sesenta años por crímenes como: Corrupción de menores, desacato, intento de soborno, violación, maltrato hacía una menor, incesto y otras cosas más, sin mencionar su mal comportamiento. Sin derecho a libertad condicional, el hombre de mediana edad estaría ahí lo que podrían ser los últimos días de su vida. Su hijo solo recibió 15 años.

En otro lugar del colegio, mientras Kimberly estaba ocupada, Damian pensó que sería buen momento para conocer a Alice de forma más "intima". -o...oye Alice.... ¿Tú... Tú y Kimberly son amigas desde hace mucho?- Alice sonrió, se levantó de donde estaba y se propuso a contar la historia, la cual acompañaría con muchos gestos y movimientos: -Sucedió cuando tenía como diez años. Yo era débil y tímida, tenía problemas de los nervios y me costaba mucho hablar, aún con mis tutores.- Damian la interrupió -¿Tu Tutela? - Alice no respondió, solo alzó la mano e hizo ademán de negación. Hizo una pausa...

-Me había escapado al parque una tarde, llevaba conmigo mi Pingüino de peluche, Patty. La tengo desde que nací, según me contó mi niñera. Unos matones me la había robado y Kimberly la recuperó por mi. A pesar de estar herida se arrodilló y, dandome el muñeco, dijo ·yo siempre la protegeré, mi Lady"- Alice suspiraba y Damian pensaba -¿Cómo competir contra eso?- Reunió valor y dijo -Entonces, Kim es como tu caballero de brillante armadura-. -Es mi príncipe azul- repsondió Alice.

La emoción la invadió, no era cosa normal de Alice. Empezó a saltar como loca y su falda, que era más corta que las demás, se levantaba dejando ver sus suaves y hermosas piernas. Se notaba también que no llevaba pantalones bajo la falda para cubrir su ropa interior, ella estaba al "aire libre". Otra cosa que se notaba a muchos kilómetros eran sus senos y... ¡pasó lo que tenía que pasar! Damian ni enterado porque seguía absorbido. Sin embargo, Kimberly, que acababa de llegar del baño, sí vio el enorme paquete en los pantalones de Damian. Se quedó sin moverse unos segundos ¿qué debía hacer? Eso estaba claro... Esas "cosas" solo hacían daño y no podía permitir que Alice viviera lo mismo que ella... De verdad no podía....

Ella se acercó sigilosamente y le pegó a Damian en la nuca, causnado un desmayó. Lo cargó sin problemas, Kim soportaba un peso de hasta 200Libras en sus brazos. Subió las escaleras y, desde allí, lo lanzó. Alice se percató de todo al escuchar el fuerte sonido del cuerpo caer por las escaleras. No había nadie en esa área, pero todos fueron atraídos por el grito de Alice, tanto como Buitres son atraídos a la carne recién fallecida. La ambulancia llegó rápidamente y Damian fue trasladado al hospital, donde recibiría tratamiento.

Continuará....

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